Le pido el último beso, lo rechaza señalando a un viejo mirón, acepto tener que irme así. Sacamos las cosas, caminamos hacia el aeropuerto, dentro veo la señalización del check-in, vamos allá.
Trámites listos, necesidades básicas cubiertas, esperamos el inicio del embarque, me abraza con uno de sus brazos, lo disfruto, la abrazo de vuelta.
Aparece habilitado el embarque del avión, me lo señala.
Conversación de echar de menos o no... pienso: al menos nadie estará haciendo cosas que la molesten, no estará retando a alguien, no rabiará tanto... si sólo pudiera almacenar su olor para poder viajar y olerlo cada vez que lo necesite.
Paso por los detectores de metales, vuelvo la cara... veo pasar su pelo... pero no era ella... ya se fue.
Busco la puerta, la encuentro y está cerrada, maldigo haber entrado tan luego, podría haberla abrazado más tiempo, me paseo un rato a la espera, Suena el teléfono, es ella, la sonrisa en mi cara aparece inmediatamente, hablamos un rato, me pregunta si embarqué... si sólo hubiera sabido que no iba a embarcar hasta media hora después y que mientras se embarcaba iban a hacer el último llamado la habría disfrutado más, luego de hablar un rato, nos despedimos con envíos de besos y un te amo mutuo.
El vuelo fue muy distinto al primero, fue lo más normal del mundo...tal vez era porque lo que vendría era lo más normal y fome del mundo, todo lo contrario al anteriór.
Llego, espero a mis padres, regreso a "casa".
Entro, todo parece nuevo, extraño, es como si nunca hubiera estado en esta casa y a la vez si, todo era distinto pero estaba todo en el mismo lugar. Despierto y saludo a mi abuelita anunciándole mi llegada. Abrazo apretado.
Por fin llego a mi pieza, a mi más extraña aún pieza.
De pronto la siento chica, sin espacio, antes era el necesario... pero ahora no alcanza a serlo, están mis cuadros, mi ropa, mi querido pc, mi ahora pequeña cama, pero no cuadra, ya no está ella, no están esas criaturitas que me tomaban por cama cada vez que la abrazaba mientras estábamos acostadas, ya no le podré pedir permiso para abrazarla por el miedo a abrazarla y sentir el rechazo de mi cariño, y lo más importante: ya no la podré abrazar.
Ahora sólo queda esperar, juntar plata y esperar hasta el día de poderla volver a ver y sentir su olor.
1 Respuestas? Comentarios?:
te haré un eau de christinne XD me embadurnaré en manteca vegetal y lo meteré en un frasco despues de procesarlo a lo "el perfúme" te extraño y te sigo abrazando en mi acorazado corazón
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